Cuando esta enfermedad bacteriana infecta plantas jóvenes de la familia de las coles, las hojas se vuelven amarillas y las plantas se atrofian y mueren. En las plantas más viejas, los primeros signos de infección suelen estar en las hojas inferiores, que desarrollan lesiones amarillas en forma de V en sus bordes. La infección se propaga gradualmente hacia el centro de la hoja y las venas dentro de este tejido muerto se vuelven negras. A medida que avanza la enfermedad, las cabezas de repollo y coliflor pueden pudrirse.
La bacteria se propaga a través de insectos, salpicaduras de agua y herramientas contaminadas. El clima cálido y húmedo fomenta la enfermedad, que ocurre en la mayor parte de América del Norte, pero es más común en el Este.
Prevención y Control
- Plante semillas y trasplantes certificados libres de enfermedades.
- Cuando sea posible, elija variedades que sean resistentes a la pudrición negra.
- Si el espacio en su jardín lo permite, siga una rotación de cultivos de tres a cuatro años para evitar plantar cultivos susceptibles en la misma área.
- Use riego por goteo o mangueras de remojo en lugar de riego por aspersión para mantener el follaje seco.
- Destruya o entierre profundamente las plantas infectadas.