Muchos horticultores caseros tienen un espacio limitado en el jardín, dando como resultado que las mismas plantas se cultiven en los mismos lugares año tras año. Esta práctica común conduce a la acumulación de patógenos transmitidos por el suelo (que causan enfermedades como el tizón del sur, marchitez bacteriana, Pudrición del tallo por Sclerotinia, etc.), insectos (gusanos de alambre, gusanos cortadores gusanos de la raíz etc.), y nematodos en el jardín. La rotación de cultivos es una práctica