La nutrición animal se centra en el estudio de las necesidades dietéticas de los animales. Estas necesidades dietéticas consisten en nutrientes, que son los componentes presentes en el alimento que los animales digieren y utilizan.
La forma en que se alimentan nuestros animales de ganado puede afectar la tasa de crecimiento, la capacidad de producción y el estado de salud del animal tanto negativa como positivamente.
Por ello, el conocimiento de la nutrición animal es clave para una explotación ganadera rentable y sostenible.
Una vez que se adquiere un producto de alimentación comercial, el valor nutricional debe aparecer en la etiqueta del producto, mientras que el producto elaborado a partir de productos agrícolas, como cultivos forrajeros, residuos de cultivos, granos, etc., debe analizarse para asegurarse de que tiene un requisito nutricional adecuado.
Los animales saben autorregularse y dejan de comer una vez que se sienten satisfechos. Sin embargo, si el contenido de nutrientes del alimento es muy bajo, el alimento consumido no será suficiente para satisfacer sus necesidades y pueden sufrir desnutrición, incluso si se alimentan ad libitum.
Los requerimientos de nutrientes de los animales pueden variar entre diferentes especies, la misma especie en diferente estado o bajo diferentes factores externos
Por ejemplo, una vaca lechera necesitará más energía, agua, fibra y calcio que una vaca de carne. Además, la finalidad productiva también influye a la hora de diseñar una dieta:feedlot, mantenimiento, agricultura ecológica, etc. todas ellas tienen requerimientos diferentes