Los agricultores están constantemente involucrados en lo que puede parecer una guerra.
Esa guerra contiene muchas batallas y muchos enemigos. Por el lado ambiental, hay esfuerzos para usar una menor cantidad de fertilizantes, pesticidas y agua; formas de combatir enfermedades que no destruyen todo lo demás; y el riesgo siempre presente de superbacterias mutadas, resistentes a los pesticidas existentes.
Hay toneladas de investigación basadas en encontrar cuál es la forma correcta de atacar estos problemas; hay diferentes conclusiones, pero no falta trabajo en ese frente. Donde casi no hay investigación es en el lado psicológico:¿Cómo convencen aquellos que han ideado soluciones ambientales a los que realmente están en el terreno, los agricultores, para que las implementen?
Un nuevo estudio de Rothamsted Research, una de las instalaciones de investigación agrícola más antiguas del mundo, analizó específicamente esa pregunta. Los agricultores son los consumidores finales de muchos de estos planes ambientales y enfrentan tremendas presiones económicas y sociales solo para sobrevivir. Encontrar formas de trabajar con los agricultores para poner en marcha nuevas estrategias es vital.
Para obtener más información al respecto, los investigadores utilizaron el problema del huanglongbing, a veces llamado enfermedad del enverdecimiento de los cítricos, una infección bacteriana devastadora que ha causado daños masivos en las granjas de cítricos. Los investigadores combinaron un estudio sobre la propagación del huanglongbing con lo que se llama un modelo de dinámica de opinión, una herramienta de psicología social diseñada para ayudar a descubrir de dónde provienen las opiniones y cómo se forman. El modelo utilizado en este estudio incluyó resultados de encuestas de productores de cítricos.
Lo que los investigadores encontraron es que hay ciertas técnicas que son más efectivas que otras para lograr que los agricultores se preocupen e implementen los planes. Uno de los hallazgos más interesantes es que es mucho más efectivo informar a los agricultores sobre las fortalezas y los beneficios de un plan en particular, en lugar de explicar cuán grave es el problema. “Muchas campañas se enfocan en el riesgo de enfermedades, pero hacerlo puede ser innecesario y generar una pérdida de confianza si en realidad nunca ocurre una epidemia”, se lee en el comunicado de prensa del estudio.
También es importante la comunicación frecuente y constante entre los agricultores y quien ideó el plan que están utilizando. Aquí es donde los recortes al USDA podrían ser debilitantes:el alcance de los agricultores parece ser vital para luchar en todas las batallas que los agricultores tienen que enfrentar.
Es un estudio fascinante, y ciertamente parece que debería haber más investigación sobre este tema de la que hay.