COVID-19 ha puesto de manifiesto la fragilidad de las cadenas alimentarias y está sometiendo a escrutinio la forma en que producimos y consumimos alimentos. Ha llegado el momento de buscar posibles tecnologías alimentarias para construir más sostenibles, producción de alimentos impulsada por la tecnología. Esto puede producir alimentos saludables y libres de gérmenes y residuos para el consumo humano.
Existe una tendencia creciente de jardinería urbana o huertas donde los consumidores pueden producir sus propias verduras reciclando los desechos de la cocina. Los programas agrícolas apoyados por la comunidad en los que los pequeños agricultores están innovando para conectarse entre sí a través de nuevas iniciativas de marketing en línea están entrando en escena. Para cerrar la brecha y ampliar las tecnologías alimentarias, varias nuevas empresas están entrando en esta nueva arena. Aquí se destacan pocos de varios enfoques sostenibles.
Carne cultivada:
La carne cultivada es un sector incipiente donde la carne se produce artificialmente en laboratorios. Todavía está lidiando con los signos de interrogación sobre la escalabilidad, su propia huella hídrica y de carbono y la aceptabilidad de los consumidores. Este sector es enormemente dinámico, como la reciente asociación de KFC con la empresa rusa. Soluciones de bioimpresión 3D Desarrollar alternativas de carne de pollo cultivadas en laboratorio que consisten en materiales vegetales y células animales cultivadas. Aunque existen varios factores limitantes, La carne cultivada puede ser una tendencia creciente en el futuro. Especialmente en los sectores de la alimentación moderna donde las personas están en busca de ética, verde, y sistemas de producción sostenibles.
Agricultura vertical:
La agricultura vertical es otra innovación en la que existe el potencial de aumentar el rendimiento de los cultivos por unidad de tierra. Aparte de la huerta, otros espacios interiores como túneles abandonados, Los pozos de la mina podrían usarse para esta tecnología. Además de maximizar el rendimiento de los cultivos, La agricultura vertical puede reducir la huella de carbono al acercar la agricultura a los consumidores.
Agricultura circular:
La agricultura circular es cuando los desechos de la industria alimentaria se reciclan en alimentos a través de la producción de biofertilizantes que de otra manera se desperdiciarían y representarían la mayor amenaza para el agua limpia. Los biofertilizantes pueden ayudar a preservar el agua limpia y la tierra sana para las generaciones futuras.
Diagnósticos de IA:
Las aplicaciones y herramientas basadas en inteligencia artificial permiten a los agricultores inspeccionar sus cultivos, probar el suelo, agua, y detectar enfermedades de las plantas con anticipación. Las aplicaciones avanzadas basadas en inteligencia artificial pueden detectar incluso cambios mínimos en el clima o el microambiente y, en consecuencia, guiar a los agricultores para que realicen los cambios necesarios en los insumos y la gestión agrícolas.
Las oportunidades en la tecnología agrícola basada en inteligencia artificial son múltiples y podemos esperar ver más innovación e interrupción de las nuevas empresas que se especializan en tecnologías alimentarias.
En breve, la industria de la tecnología alimentaria seguirá cambiando la forma en que producimos, consumir, y pensar en lo que comemos.